TARTA DE CREMA Y FRUTAS FRESCAS

tarta de crema y frutas frescas

DIFICULTAD: Media

TIEMPO: 90 minutos

Nº COMENSALES: 8 personas

VALOR ENERGÉTICO: 251 Kcal por 100 gramos

INGREDIENTES

250 g de harina de trigo

40 g de azúcar

125 g de mantequilla (muy fría)

100 g de agua (bién fría)

Una pizca de sal (5 g aprox.)

50 ml de leche entera

4 yemas

125 g de azúcar

50 g de harina fina de maíz

1 cucharadita de esencia de vainilla

3 g de gelatina neutra (aproximadamente medio sobre)

215 ml de agua

2 kiwis

2 albaricoques

Un rácimo de uvas sin pepitas

10-12 frambuesas

PREPARACIÓN

Calentamos la leche en un cazo, a fuego medio, junto con la esencia de vainilla.

Cuando esté a punto de hervir, pero que no llegue a hacerlo, retiramos del fuego y dejamos atemperar.

Batimos las yemas en un recipiento hondo junto con el azúcar y la harina fina de maíz.

Debemos conseguir una masa homogénea y sin grumos. Añadimos medio vaso de leche y removemos con energía hasta que todo quede bien mezclado.

Repetimos la operación hasta terminar con toda la leche del cazo.

Volcamos la mezcla de nuevo en el cazo y cocemos a fuego suave, sin dejar de remover para que no queden grumos, hasta que espese.

Entonces retiramos, pasamos a otro recipiente y reservamos tapada con film transparente, en la nevera, hasta el momento de su uso.

Tamizamos la harina dentro de un recipiente amplio y hondo, añadimos el azúcar y un pellizco de sal.

Incorporamos la mantequilla cortada en dados y mezclamos con los dedos hasta conseguir una textura que recuerde a migas.

Por último agregamos el agua y trabajamos con los dedos, evitando excedernos.

En cuanto todos los ingredientes estén ligados, envolvemos la masa con papel film y la dejamos reposar en la nevera durante 30 minutos.

Transcurrido el tiempo de reposo estiramos la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada, hasta un par de milímetros de grosor.

Cubrimos la base y paredes de un molde desmoldable de 22 cm de diámetro apto para horno.

Recortamos el sobrante y rematamos los bordes con los dedos con alguna filigrana  para que quede presentable.

Cubrimos con papel sulfurizado de horno y rellenamos con legumbres viejas o bolas específicas para hornear.

Cocemos en el horno, precalentado a 180 ºC, durante 15 minutos.

Retiramos el peso y el papel y cocemos de nuevo otros 15 minutos antes de retirar y dejar enfriar por completo.

Hidratamos la gelatina en un cuenco con 3-4 cucharadas de agua durante cinco minutos,

Colocamos el resto del agua en un cacito y calentamos. Cuando alcance el punto de ebullición apagamos e incorporamos la gelatina hidratada.

Removemos hasta disolver por completo y dejamos atemperar.

El baño de brillo espesará según se enfría, hay que vigilarlo y remover de vez en cuando para que no gelatinice en exceso.

Una vez adquiera una consistencia como de mermelada terminamos la tarta.

Desmoldamos la masa base cocida y la rellenamos con la crema pastelera, extendiendo bien por toda la superficie sin llegar al borde.

Necesitaremos un poco de espacio para colocar las frutas sin que se desborden.

Pelamos y cortamos los kiwis en láminas finas. Lavamos los albaricoques, los abrimos por la mitad, retiramos el hueso y laminamos.

Cortamos las uvas por la mitad longitudinalmente.

Colocamos las frutas a nuestro gusto sobre la crema pastelera y rematamos con unas frambuesas en el centro.

Pincelamos con el baño de brillo, asegurando que no quedan huecos sin cubrir.

Reservamos en la nevera por lo menos una hora para que la gelatina acabe de asentarse.